Champions League - Semifinales

Gran partido el martes en Old Trafford. Los medios de comunicación nos habían hablado de un Manchester poderoso durante toda la temporada, y de una clara apuesta atacante de su entrenador. Las dos cosas quedaron ratificadas, y el resultado final, de tres a dos, si bien es corto, les da esperanzas ya que podrán afrontar la vuelta con ventaja. El partido fue un verdadero espectáculo, con varios jugadores que salen claramente de la mediocridad: Cristiano Ronaldo está en un momento dulce, y cada arrancada suya va acompañada de una potencia que le hace temible. Scholes estuvo impresionante, y aparte de dar el segundo gol a Rooney, hizo un trabajo incansable. Y éste, cuando moría el partido, en un arranque de furia, marcó un tanto que bien podría decantar la eliminatoria finalmente. Mis simpatías no pueden ir en este caso más que con el Manchester, un equipo que en el minuto 90 sigue atacando con la misma fe que al inicio. En el lado milanista Kaká fue el mejor, con dos goles para enmarcar, en el primero fue muy habilidoso pero lo del segundo fue más de magia que de fútbol, consiguió que los defensas ingleses tropezaran entre ellos, para plantarse sólo delante del eterno Van der Sar, y batirle con la misma facilidad con la que Calderón anunció su fichaje. El Milán hizo un gran partido, muy serio, pero delante tenía fútbol en estado puro.

La otra semifinal, entre Chelsea y Liverpool, toma color azul. Tuve la oportunidad de ver el partido por Internet, y ciertamente fue un duelo táctico, del que salió vencedor Mourinho. Los suyos, que tenían unas cuantas bajas importantes (Essien, Ballack, Robben) dominaron el primer tiempo, y crearon las ocasiones más claras. En una de las arrancadas Drogba puso un balón de oro a Joe Cole, y Reina, muy seguro toda la noche, no pudo evitar el tanto. Después, los reds se hicieron con el balón, pero nunca con el partido. Fue un dominio territorial, sin crear mucho peligro, exceptuando un disparo con la izquierda de Gerrard, único jugador imprescindible de este equipo. Es el verdadero alma de los suyos, y lo que hace cada partido es muy parecido a tirar del carro. Arbeloa cometió un penalti clarísimo, al tocar la pelota inocentemente con la mano, pero el árbitro alemán quiso darle emoción a la eliminatoria al no pitarlo. Los últimos minutos fueron insulsos, los locales se conformaban con el uno a cero y los visitantes se mostraban incapaces. Huele a venganza de Mourinho, veo muy posible un empate a uno en la vuelta.

No quiero dejar escapar esta oportunidad para hacer un comentario acerca de Zenden, el interior izquierda holandés del Liverpool. Durante su estancia en el Barcelona sólo le vi hacer partidos discretos, y me sorprendió mucho que Benítez, justo después de proclamarse campeón de Europa, se fijara en él. Ayer le miraba con mis mejores ojos, tratando de adivinar unas virtudes que se me escapan. Evidentemente con esto no le culpabilizo de la derrota, sólo quería apuntar la sorpresa que me causa que este futbolista se mantenga en equipos de élite, y jugando partidos decisivos.

Hoy, semifinales de UEFA, con los equipos españoles peleando por un título que ya acarician.

Dos breves notas más., Ayer comenzó la participación de Nadal en el torneo Conde de Godó de Barcelona, ante el belga Vliegen. La superioridad del menorquín en tierra es tal que, al finalizar el partido (6-1, 6-1), comentó que había sido una pena que los puntos fuesen tan cortos, dando a entender que con un poco más de resistencia de su adversario, al menos habría sido un buen entrenamiento. Y Valverde no pudo repetir victoria en la Flecha Valona ya que no aguantó el tirón final de Rebellin. El veterano corredor italiano fue más fuerte en el último repecho. Veremos si en Lieja el murciano, que también venció allí el año pasado, es capaz de repetir la hazaña.