Maracana-1950

22 de mayo de 2008

Final en Moscú


No me gustó la final de Liga de Campeones, de la que mucha gente esperaba un gran espectáculo. Aunque debo decir que vi sólo una pequeña parte del segundo tiempo, y la prórroga entera. Puse Radio Marca, algo inaudito en mí, que soy un sicario absoluto de Paco González y de la cadena Ser, pero como éstos no dieron el partido (otros años si lo hacen), decidí que la narración de Luque por Antena 3 carecía de la salsa necesaria para no quedarme frito delante del televisor, reventado como estaba tras otro día atareado, y moví, por una vez, el dial. Así que escuché a Cappa, que me encanta, a Axel, que parece que es estilo Maldini, a Andújar Oliver y el resto del equipo, del que no conozco los nombres. Amenizaron un partido gris, impropio del fútbol inglés, en el que me hubiese gustado ver al Liverpool. Creo que el Chelsea mereció mejor suerte, y que Liga y Champions es premio excesivo para los de Fergusson, que tienen fama de ofensivos pero que a la hora de la verdad especulan como el que más. Los equipos españoles, si se refuerzan como es debido, pueden superarles el próximo año.

Lo mejor, el desenlace, desde los once metros y bajo una lluvia torrencial. Lo primero que hay que decir es que ninguno de los dos porteros (Cech y Van der Sar) destacan en esta especialidad. Así que dependía más de los jugadores que de los arqueros. Como Cristiano Ronaldo juega para él, y le encanta la comedia, decidió que era el momento idóneo para hacer una payasada. La eterna paradinha que intentó se le acabó yendo de las manos, y luego no supo salir del apuro, ya sin carrerilla. Su cara era un poema. Durante unos minutos, y hasta que falló Terry, pensé que ese error supondría su salida de Inglaterra, que los medios ingleses no le perdonarían el exceso. Pero la vida fue muy cruel para Terry, que se escurrió en el peor momento. También para Abramovich, pobre por un día. Anelka puso punto final a la fiesta. El francés, tras cientos de años jugando al fútbol, al parecer no ha aprendido aún a tirar penales. A Ronaldo la presión acumulada le hizo desplomarse en el césped, y celebrar la victoria tumbado sobre él, boca abajo. ¿Vendrá a nuestro país? Es un gran jugador, pero tiene algo que no me gusta.

7 de mayo de 2008

Pasillos y otras cositas


Llevamos varios días hablando del pasillo que esta noche le hará el Barcelona al nuevo campeón. Se trata de un justo reconocimiento, que además es tradición en nuestro fútbol. Creo que está bien que así sea, y quedaría feo lo contrario.

Cierta parte de la prensa, fiel a su ignominia, se encarga, sin embargo, de desvirtuarlo. Tratan de que lo veamos como una humillación, cuando no lo es. Los titulares y los comentarios se repiten. Ya al día siguiente de la derrota en Manchester metían el dedo en la herida.

Si fuera algo aislado no pasaría nada. Pero, normalmente, estos medios actúan irresponsablemente. De esta manera provocan distanciamiento entre aficiones, rencores, etc. Luego, algún maleducado, comete una acción violenta, que por supuesto no tiene justificación. Entonces estos medios se le echan encima, como si ellos fueran referencias morales, cuando son pura basura.

Más cosas: ayer el señor Relaño elogió a Mijatovic. El director de As escribió que, en numerosas ocasiones, se le ha tratado con cierto desdén, y que se ha aprovechado su condición de serbio (?) y su gusto por la gomina para de alguna manera desprestigiarle. Sin embargo, Relaño, hinchado de éxito tras la consecución de la Liga, se anima a decir que Pedja es un tipo listo, y alaba su gestión.

Por tanto, gastarse 36 millones de euros en Robben no era descabellado. El fichaje de Metzelder fue afortunado, y lo de Saviola un gran acierto. Drenthe también ha dado un gran rendimiento, por no hablar de Dudek, que casi le quita el puesto a Casillas. Repescar a Soldado le ha ayudado mucho en su progresión como futbolista.

Ciertos profesionales de la información (Manolo Lama el primero, por supuesto, porque tiene que ser el primero en todo, Relaño el segundo) fundamentan sus opiniones en relaciones personales, y son muy tercos. El Real Madrid tenía una buena base del año pasado, e hizo algunos fichajes interesantes (Heinze, Snejder, incluso Pepe, que sin embargo salió muy caro). Pero no ha ganado la liga gracias a Mijatovic, ni mucho menos. Aunque Don Alfredo lo repita mil veces.

En otra de sus perlas, la de hoy, comenta las distintas interpretaciones que hicieron Real Madrid y Barcelona del desenlace de la Liga pasada. Siempre según él, el Barcelona lo vio como un accidente, y apenas fichó. Eso no es verdad porque en verano no sólo vinieron Henry y Abidal, como parece insinuar, sino que también aterrizaron Yayá Touré y Milito. Salvo el ex del Arsenal, ya en pleno declive, los demás me parecen buenos jugadores. De hecho, los problemas en el club azulgrana vienen por otro lado. El club no ha sabido ayudar a su entrenador en lo que peor se le da a Rijkaard, el tema de la disciplina. Un vestuario contaminado, en el que hay jugadores capaces de borrarse de partidos, ha acabado con él, sin que Laporta haya sabido remediarlo. La plantilla, sin embargo, era magnífica, una de las mejores del mundo sin duda.

Por último, que nadie se engañe. La temporada del Madrid, que ahora la pintan como inmejorable, ha tenido muchos puntos oscuros. El juego del equipo ha sido muy irregular, y si bien es cierto que ha vencido en muchos de los campos más complicados, tampoco lo es menos que en la primera parte de la temporada se ganaron partidos increíblemente, como sólo lo sabe hacer el Madrid (bueno, y el Bayern, y la Juve...). Lo mejor de los blancos sigue siendo su carácter, eternamente ganador. Ahí tienen mucho que aprender en Barcelona.